- Categoría: Reseñas históricas
Una de las mejores formas que conozco para disfrutar con la historia son las novelas gráficas: la historia imaginada y recreada por la feliz combinación de un guionista y un dibujante. Hay algo en las imágenes dibujadas, una fuerza y un poder de evocación que difícilmente pueden ser igualados por una descripción, por muy hábil que esta sea.
Y es que una cosa es leer que un personaje entra en un territorio virgen y otra muy distinta caminar a su lado, subirse a una canoa con él, observar juntos el bosque impenetrable que os rodea mientras avanzáis hacia el oeste. Está claro que una novela gráfica siempre ofrecerá, por requerimientos ineludibles del género, una información mucho más reducida que la que puedes encontrar en un libro de historia, pero, a cambio, te permitirá sumergirte en la época como si acabaras de atravesar un túnel del tiempo...
- Categoría: Otras reseñas
Me temo que he entrado en barrena. La lectura de La vida secreta de los árboles, del que te hablé hace varias semanas, ha destapado la caja de los truenos. Unos truenos muy naturales, eso sí, y que me están haciendo disfrutar de lo lindo. ¡Cómo se nota que con tanta pandemia y tanto encierro todos estamos deseando un poco de aire libre!
El caso es que tras La vida secreta de los árboles, devoré —y ya te comenté— En un metro de bosque, de David George Haskell, una espléndida lectura para acercarnos a la naturaleza. Y ahora no he podido resistirme a otro título de Peter Wohlleben, este La vida interior de los animales, que he devorado de una sentada... Déjame que te cuente por qué.
- Categoría: Viajando en furgo
Viajo en la Salvaje, mi furgoneta camperizada, persiguiendo historias, lugares y momentos.
A Pontenova está lejos de haberme desvelado todos sus secretos. La ruta por las fragas me ha demostrado que las primeras impresiones ocultan a menudo las verdades más profundas.
Al atardecer, mientras presento en la Casa da Cultura, ante un público generoso y atento, mi libro Atravesando Galicia —en el que relato mi paso por esta localidad—, mientras explico los motivos que me llevaron a realizar el viaje, mi mente no deja de darle vueltas a esa idea: que la A Pontenova que entreví nueve meses atrás tiene poco que ver con esta A Pontenova que hoy he descubierto. Que la realidad siempre es polifacética, siempre compleja, mucho más rica de lo que nuestros sentidos, en un intento por aprehender a primera vista la realidad para desenvolvernos en ella, consiguen captar.
Y todavía no he vivido lo que me espera al día siguiente...
- Categoría: Viajando en furgo
Viajo en la Salvaje, mi furgoneta camperizada, persiguiendo historias, lugares y momentos.
En septiembre de 2020, durante mi viaje a pie a través de Galicia, llegué a una pequeña localidad lucense que hasta el momento me había pasado desapercibida. Apenas recordaba haberla atravesado en coche una o dos veces de camino a otra parte, pero nunca me había detenido en ella. La población, a primera vista, no es más que una larga hilera de edificaciones modernas alineadas en ambas riberas de un río: no hay en ella casco antiguo ni hermosas plazas medievales, ni iglesias o castillos destacables, nada salvo cuatro inmensas estructuras que a primera vista parecen gruesas chimeneas de ladrillo y que son en realidad antiguos hornos de calcinación para depurar el hierro.
Pero las primeras impresiones, a veces, están profundamente equivocadas. Antes de empezar mi viaje a pie a través de Galicia, Elena Iravedra, una mujer de la localidad que descubrió mi proyecto a través de las redes sociales, se puso en contacto conmigo para sugerirme que al pasar por A Pontenova me detuviera en la oficina de turismo, al cargo de Carlos Pardo, que se ofrecía a mostrarme la villa. También me dijo que hablara con otro pontenovés, Carlos Bermúdez, que conocía bien todo lo que la localidad tiene de especial.
Así lo hice: estuve una tarde entera hablando con ellos, que resultaron ser de lo más cordial, y descubriendo que A Pontenova era mucho más de lo que pensaba. Pero tenía que seguir mi camino. «Tienes que volver, Fran», me insistió Carlos Bermúdez. «Cuando publiques el libro, vienes, lo presentas aquí y te llevamos a las fragas y a las minas, vas a alucinar». Le prometí que lo haría.
Y así fue. En junio de 2021, recién publicado Atravesando Galicia, Carlos Bermúdez me llamó para recordarme mi promesa. Me puse en marcha en la Salvaje y me dirigí a A Pontenova para pasar un fin de semana. Y entonces sí, entonces descubrí de verdad lo asombrosa que es esta comarca, repleta de lugares que rezuman belleza. Y misterio. Porque, en efecto, A Pontenova es la tierra donde se esconden los mitos...
- Categoría: Reseñas viajeras
¡Buenas! Ya, no me digas nada, que me lo digo yo mismo: ¡qué jeta, incluir mi último libro de viaje en la lista de los más apetecibles del verano! Si te digo la verdad, estuve dudando si incluirlo o no... unos diez segundos. Los que tardé en darme cuenta de un pequeño detalle: que si a mí no me parece apetecible, ¿a quién demontres se lo va a parecer? 😊
Así que sí, este trimestre la selección de los más apetecibles de viaje y ensayo incluye mi nuevo libro, Atravesando Galicia. ¡Y espero que lo disfrutes a fondo! Pero también incluye otros cuatro títulos de lo más tentador, estupendos todos para pasar un verano delicioso protegiéndose del sol con las páginas de un buen libro...